4 de julio de 2008

Hay edificios hermosos, enormes, que parecen comerse el cielo.



Se debe descubrir la belleza en las cosas más precarias, donde no existía. Soy capaz de crearla rompiendo con los valores establecidos y asumiendo todo tipo de riesgos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

And also we ensure that when we enter in this specific blog site we see to it that the topic was cool to discuss and not a boring one.

El eterno subalterno dijo...

Edificios que casi llegan al cielo de Berlin.

Y nosotros, como los ángeles de aquel film de Wim Wenders, pero tan impúros paseamos por tus blogs y tus palabras, en silencio, sin dejar ningún rastro.

Tú lo prefieres así, dices.

Quizás nosotros también, intentando así mantener su blanquísima pureza.

Un beso. Gracias por estar ahí.